Colaboración revista De-lirio
Sostenuto
Hay un instante
de tiempo
(ya sin peso)
de amor a domicilio
que se diluye en años
de sentarse a oír llover
mientras la noche
se abre y nos mira
como un relámpago.
Temor lunar
Entre esas dos lunas
que duermen en tu cama
y el asfalto que relumbra
sobre mis párpados
me pierdo en el oleaje
de tu respiración
llena de gracia y
—errante de la noche
y perdida— soy
el aire y el miedo
que consume.